JOSECHU
Caminos polvorientos de Castilla
Caminos polvorientos de Castilla
hartos, llenos de vida y de deseos,
despertad, gritad, cantad.
Ecos de un pasado glorioso;
brújula y guía de mesnadas;
flor naciente de un condado,
que Castilla bautizaran.
Castilla pura y valiente,
fogosa, noble y doliente;
llena de paz y simientes,
nunca enjuta en tus gentes
Marginada y estrujada;
explotada casi siempre;
de ti ya sólo se acuerdan
para sangrarte vilmente.
Tu lengua, aunque la desprecian
los sádicos y potentes,
es el jardín perfumado,
“Edén de todas tus gentes".
Caminos polvorientos de Castilla;
¡Faro de poetas olvidados!;
levadura, espigas fuertes,
campo de secano reverdecen.
Peregrinos, andantes, trovadores,
romanceros, clérigos y juglares;
broten de nuevo vuestros cánticos
en las villas y ciudades
Campesinos y pastores,
¡Vástago fuerte y potente!;
donde brota la cultura
sencilla como tus gentes.
Tu cielo siempre estrellado
nada oculta en su regazo;
en tus sierras los arroyos
espejos siempre son claros.
Caminos polvorientos de Castilla;
orgullosos sin asfalto,
donde lo humano y lo divino
se estrechan y dan la mano.
Que oren todos los santos,
los cenobios y Carmelos;
que el pueblo rompa sus lanzas,
que se unan, lo primero.
Nuestros pechos que se inflamen;
los brazos que no descansen;
todos juntos buscaremos
ser fermento de algo grande.
No hay tinieblas en Castilla
de casas desmoronadas;
porque el espíritu es fuerte
y las raíces son sanas.
Caminos polvorientos de Castilla;
largos, resecos y planos;
forja y troquel de tus hombres
que hoy se sienten más hermanos.
JOSECHU